lunes, 3 de agosto de 2009

Fantasia Multicolor de un Hómbre Gris.



Amigos...explicaré brevemente el origen de ésta obra, y para ello, dedicaré unas líneas, mas de las habituales, quizá porque en la concepción de la misma, se dieron elementos que yo percibí como especiales, y quiero hacerles partícipe de ellos, conocedores de la situación.

Soy de los que defienden que hay que mirar menos la TV, para conseguir tiempo con el que dedicarse a la afición que cada uno tenga, o simplemente para dedicar ese tiempo, al descanso de cuerpo y mente...
Pero yo no predico con el ejemplo, y reconozco que, ciertos programas sensibleros de lágrima fácil, diseñados para atrapar al espectador en un mar de emociones, me atrapan, y disfruto como un enano viendo esos abrazos entre dos hermanos que no se veían hace 20 años, o esa hija que encuentra a su madre biológica, y al escuchar su voz por el hilo telefónico, estalla sin control, en esa secuencia harto repetida, pero que siempre genera el mismo resultado en quien la ve....y ese es mi caso.
Lo reconozco, y así se lo confieso, amigos.
Aclarado este punto, que creía conveniente, paso a explicarles la relación entre todo esto y la obra que nos ocupa el presente post.
En un programa, uno de tantos, la presentadora, de verbo ágil y gran capacidad de improvisación, le pregunta al entrevistado, sobre el origen de su ceguera,... como ocurrió, y su expectativa ante la vida.....
El señor, de razonable parecido al ya desaparecido cantante Roy Orbison, tanto por las gafas como por el peinado, respondió a las cuestiones formuladas, con una considerable colección de perlas oceánicas, entre las que cabe destacar :

“...hace tantos años que perdí la visión, por culpa de aquel tonto accidente, que casi no recuerdo los colores...casi no recuerdo el verde de los árboles ni el azul del cielo...y lo que mas me intriga, es que empiezo a tener una visión de mi mismo, como de aspecto grisáceo, entienden lo que les digo...?? algo marmóreo, como de piedra...
Mis días, intento que pasen rápido, porque lo que verdaderamente ansío, es meterme en la cama, y dormir... dormir para soñar. Cuando sueño, es en colores muy alegres, o al menos con esa impronta me despierto...”

Aquellas palabras, me hicieron correr hacia una libreta, y apuntar a toda prisa...el resto, lo tiene antes ustedes.
Esta es la versión mas infantil y desenfadada de todo aquello...hay otras “encarpetadas”, quizá mas tétricas, y desde luego menos alegres, de lo que para mi inspiró éste “hombre-gris”....
Quizá, algún día finalice esas otras versiones, no lo sé.
Dependo mucho del humor reinante, la disposición de energías....el tiempo, las ganas.

Amigos, disculpen por la extensión, y como siempre, gracias por su tiempo.
Pepe Valera. 2009.

3 comentarios:

Teté Cirigliano dijo...

Pepe...como te dije en un mensajito...el genio aquí eres tu!!!
Que artista sos...sabés que te admiro muchisimo!!!

Antoni dijo...

simplemente... genial!!.Pepe, Lo tuyo no tiene cura (gracias a Dios)

Silvica dijo...

Nunca ver tv fue tan productivo...increíble.